El masaje balinés, como en muchas terapias asiáticas, tiene como objetivo la armonía total del cuerpo y la mente. Esta filosofía específica, que no se diferencia de uno de los grandes principios de Buda, permite al individuo encontrarse a sí mismo y, gracias a este equilibrio, vivir su existencia plena y positivamente.

El masaje balinés tiene como objetivo borrar los sufrimientos de la mente y del cuerpo con la ayuda de presiones más o menos fuertes sobre los puntos energéticos. Dependiendo de la cultura y de las necesidades del individuo, es posible hacer tramos específicos.

Las personas que deseen probar el masaje balinés estarán encantadas de descubrir que la habitación en la que se alojan estará decorada con agradables aromas que les ayudarán a lograr su equilibrio interior. En efecto, la masajista utiliza aceites esenciales para masajear, tienen un papel importante y son seleccionados en función de sus características y de la temperatura de la habitación. Generalmente, se utilizan aceites esenciales de rosa, ylang-ylang, flor de frangipani, jazmín y sándalo.

El masaje balinés no trata dolores específicos, sino que tiene como objetivo principal la relajación y la sensación de bienestar. Está especialmente indicado para personas con dolores musculares causados por el deporte o el estrés diario.

Los beneficios del masaje balinés 

El masaje balinés aporta muchos beneficios a corto y largo plazo. Ayuda a eliminar los efectos del estrés en el cuerpo y ayuda a restaurar el equilibrio del cuerpo y la mente.

A menudo es aconsejable para las personas propensas a las migrañas, dolores articulares e insomnio recibir un masaje balinés, ya que trata el problema en profundidad mediante el restablecimiento de la buena circulación de los flujos de energía del cuerpo.

Además de proporcionar beneficios internos, el masaje balinés esculpe los músculos dándoles tonicidad, también es beneficioso para la piel porque ayuda a su rehidratación profunda.

Fuente: https://thaispamassage.es/masaje-balines/